Blog de seguridad y defensa

lunes, 26 de noviembre de 2007

Los recuerdos de Roberta Gran.

La foto del bachiller de Roberta Gran.

"Sidi Ifni aquel territorio que nos marcó, del que nunca saldremos, aunque nunca volvamos a él" .


Un maravilloso paseo por la vida de la familia Gran. Recuerdos de otros tiempos, y de otros lugares, en los que un puñado de españoles intentaron un día salir adelante lejos de la “madrastra" Patria que luego les abandonó.

Calculo que Roberta tendrá ahora 73, justo igual que mi madre. Espero que como ella, aún pasee su belleza entre nosotros.

Si es así, la distinguireis por ese brillo especial que algunas personas tienen en los ojos, aquellas personas que estuvieron en lugares lejanos y vivieron de otros modos. Aquellos que vieron "naves en llamas más allá de Orión...en la oscuridad, cerca de la puerta de Tanhauser".

domingo, 25 de noviembre de 2007

Ecos del 11-M.

Maravilloso homenaje de Luz Casal.

Paz y Reconstrucción en Afganistán bajo el mandato de NNUU.

Me imagino que, ahora que las aficiones aclaman a sus delanteros para la final electoral que se avecina, no toca hablar de lo que ocurre en Afganistán. Ya dije que "la política es la continuación del futbol por otros medios"; la realidad es que a veces es "la continuación de la mentira poor otros medios".

Yo de todos modos persevero antes de que la competición no deje aire respirable.

En este video las operaciones de paz y reconstrucción de ISAF en Afganistán.

sábado, 24 de noviembre de 2007

¿Por qué vamos a fracasar en Afganistán?

"Por lo tanto, los que no son totalmente conscientes
de la desventaja de servirse de las armas no pueden ser
totalmente conscientes de las ventajas de utilizarlas"
SUN TZU

"Ustedes [los militares] deben saber mucho sobre estrategia, táctica y logística,
pero también acerca de aspectos económicos, políticos, diplomáticos e históricos.
Deben saber todo lo posible respecto al poder militar y sus límites. Deben entender
que, en el análisis final, los problemas importantes de nuestra era que han
sido resueltos mediante el poder militar por sí solo, han sido muy pocos."
John F. Kennedy a los egresados de la Academia Naval Annapolis.
Maryland 7 de junio de 1961

Este vídeo de France 24 da mucho que pensar sobre la derrota (no militar) que vamos a sufrir en Afganistán.

Mientras las
naciones que allí estamos no nos comprometamos de verdad con la seguridad y la reconstrucción integral (y desde luego no hablo de tropas sólo), el fin más probable es que la OTAN se acabe por retirar dejando Afganistán en manos de los Talibanes de nuevo.


Y recalco que no hablo de tropas. Los países se estabilizan con tropas, pero se reconstruyen con presupuestos para los gobiernos, con asesoramiento financiero, con sistemas judiciales, con mucha educación, con servicios sociales, con sanidad y con mucho, mucho dinero. Y las cifras son clarificadoras:

Me imagino que todos se habrán dado cuenta de que nuestro país falta de la lista. Así es, España no contribuye al Afghanistan Reconstruction Trust Fund más que con la parte alícuota que le corresponde de los 27 de la Unión Europea. Lo cual es 1/27 de una miseria. Sólo el Reino Unido ha aportado casi el doble (556 millones $) que toda la UE (281 millones $). Después del Reino Unido, los siguientes contribuyentes han sido EEUU con 333 millones $ y Canadá con 319 millones $. Destacan también Holanda con 238 millones $ y Alemania con 125 millones $. La relación entre las tropas apoortadas y el dinero es curiosa.

Pero lo verdaderamente sorprendente es que en Afganistán, con 27 millones de habitantes, no se han llegado a movilizar, entre todos los países, más que 2,3 billones $ desde 2002 (SY1381) hasta 2007 (SY 1386).

El plan de recuperación europea (luego conocido como Marshall) ascendió inicialmente a 17 billones $ de la época.

La estimación del Banco Mundial sobre el coste de la reconstrucción iraquí (25 millones de habitantes) en 2004 era de 75 billones $. El Congreso de EEUU ha aprobado inversiones de 18,6 billones desde 2004.

En Bosnia, con 4 millones de habitantes, se gastaron entre 1996 y 2002 casi 6 billones $.

Si hacemos una sencilla cuenta, en Bosnia se invirtieron 250 dólares por habitante y año durante ese periodo (6 años de post-conflicto) , mientras que en Afganistán, se han invertido 18,5 dólares por habitante y año en un periodo parecido (5 años de post-conflicto). En Irak se han invertido en los tres primeros años del post-conflicto 253 dólares por habitante y año. ¿Es casualidad?

¿Y dónde están los fondos que España dedica a la reconstrucción? En ningún sitio. Los ridículos fondos que España gasta en Afganistán son controlados por el PRT de Qala i Naw (14 millones $ en 2006) y por el de Herat (14 millones $ en 2006) , no por las autoridades de Afganistán. Los fondos se dedican a la labor CIMIC (cooperación cívico militar) y a algunos proyectos de interés en la ciudad , que poco -aunque algo- tiene que ver con la reconstrucción real del país.

ISAF es una fuerza de asistencia a la seguridad. Su única misión es proporcionar seguridad para que "otros" reconstruyan. Estos "otros" son esencialmente las autoridades civiles y los virreyes internacionales que les vigilan y asesoran. Por ello el Afghanistan Reconstruction Trust Fund se pone en manos de las autoridades civiles afganas, bajo estrecha supervisión y asesoramiento del Banco Mundial. Ellos son los que han de construir el país y conquistar la confianza de sus ciudadanos. Las tropas internacionales aquí, como en Bosnia, sólo valen para darles tiempo y respaldo.


Las fuerzas de seguridad afganas.

Pero las tropas internacionales al operar en el terreno necesitan también mejorar su seguridad, de muchos modos, uno de ellos mediante la acción CIMIC. El objetivo de cualquier misión CIMIC es el cumplimiento de la misión militar. CIMIC contribuye a este cumplimiento proporcionando información, relacionándose con la población, tejiendo confianza y dando buena imagen de la fuerza. En definitiva, CIMIC contribuye a la seguridad de las tropas que a su vez son las responsables de proporcionar seguridad a la población. Los proyectos que lleva a cabo son fundamentalmente dedicados a ello. No son altruistas, ni son controlados por las autoridades civiles del país. CIMIC opera allí donde la misión lo requiere, no donde las autoridades o la población lo necesitan más. Me imagino que entenderán que la reconstrucción del aeródromo de Qala i Naw no es para que los afganos tomen los numerosos vuelos internacionales que salen de allí. O que la reconstrucción de determinadas carreteras es un modo de mejorar los atascos generalizados (desde luego también beneficia a la población, pero no es el objetivo primordial). Por tanto hay que entender que los PRTs no son la herramienta fundamental de la reconstrucción, son sólo un medio de seguridad. La finalidad de hacer y llamarles PRTs no es otra que hacer más amigable la presencia de las tropas; no es otra que contribuir a la estabilidad y a la seguridad de la zona, y fundamentalmente, de las tropas. Los fondos destinados a la reconstrucción a través de los PRTs son irrisorios y por no ser gobernados por las autoridades afganas, redundan bien poco en la reconstrucción verdadera.

Y que nadie crea que esto es una crítica, es sólo una aclaración para ingenuos navegantes. Quid pro quo, la reconstrucción verdadera de un país necesita de seguridad y tiempo, las fuerzas que proporcionan esa seguridad y ese tiempo, hacen "reconstrucción interesada" para mejorar su propia seguridad y por tanto cumplir mejor su misión.

Así que está muy bien hablar de más tropas, de MRAPs y de UAVs, de carros y de táctica. Yo soy el primero que apoyaré mejorar la seguridad de nuestras tropas en lo que sea necesario, pero en realidad este post-conflicto, como casi todos, lo ganarán o lo perderán las voluntades políticas y los recursos financieros que nuestras sociedades estén dispuestas a invertir en ello. Y vamos por muy mal camino.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Tiempo de relevos.

El Coronel (R) Candil arremete en GEES contra la Propuesta de Capacidades Militares en "En torno a la Propuesta de Objetivo de Capacidades Militares (POCAM )".

Desgraciadamente arremete contra la POCAM sin saber exactamente lo que es. Cree -y como cree irá al cielo pero no entenderá el asunto-, que la POCAM es un documento librado ahora a final de legislatura como consecuencia de la proximidad de las elecciones, una declaración de intenciones, vaya.

Ya se explicó en este blog lo que es la POCAM en “La capacidades militares futuras (POCAM).”:

“La
propuesta de objetivo de capacidades militares (POCAM) es fruto del nuevo proceso de planeamiento de la defensa nacional aprobado por OM. 37/2005. En realidad es la culminación del planeamiento que se inicia con la Directiva de Defensa Nacional que emite el Presiente del Gobierno cada cuatro años y que intenta responder con un planeamiento detallado (qué es necesario, por qué, para qué y cómo se va a adquirir) a lo que aquel ha ordenado. Se revisa de manera bianual para evaluar su cumplimiento y se modifica si es necesario en todo aquello que sea sobrevenido a lo planeado. Contiene objetivos a largo plazo (15-20 años), medio plazo (6 años) y corto (3 años).”

En definitiva, la POCAM es la culminación de dos años de planeamiento desde que fue aprobado el nuevo sistema de planeamiento conjunto en 2005. En ella ha participado el EMAD y los CG,s de los Ejércitos y la Armada. En el gráfico se puede ver el proceso que sigue:

Con este nuevo sistema de planeamiento se intenta precisamente corregir el sistema de planeamiento al que el Col Candil estaba acostumbrado, el sistema que permitía adquirir a cada Ejército los sistemas que les pareciese preciso sin tener en cuenta lo que desde el nivel conjunto se demandaba. El sistema que permitía que tras expresarse desde el nivel conjunto (el nivel defensa) la necesidad de unidades medias en la RED, permitía que otros sólo pensasen en potenciar las unidades pesadas –el Col Candil era su principal valedor- haciendo caso omiso de lo que la Defensa Nacional expresaba necesitar. El sistema que ha permitido hipotecar los recursos que los ciudadanos ponen a disposición de las FAS para adquirir sistemas a largo plazo que poco tienen que ver con los retos que las FAS afrontan hoy día.

Por eso el nuevo sistema de planeamiento de la defensa con revisión bianual, por eso la supervisión del nivel conjunto sobre lo que los CGs de lo Ejércitos dicen necesitar, por eso la POCAM, para responder con más agilidad a las nuevas situaciones. En definitiva, por eso el cambio, hay que modernizarse. Tengo mucho respeto por el Col Candil, pero ha llegado el momento del relevo. Lo que él conoció ya no vale porque ha producido tremendas lagunas. A día de hoy tenemos el mejor carro del mundo pero resulta que el vehículo en el que nos jugamos lo bigotes de verdad está completamente obsoleto. Y principalmente es porque alguien no pensó en ello, creyó que podríamos seguir con los BMRs hasta el 2015. ¡Total!, no era importante.

Nuestra sociedad y sus representantes –los de un lado y el otro- nos ordenan estar en unas misiones muy concretas, para las que es necesario un vehículo medio robusto y protegido, muy ágil y de perfil moderado, pero algunos militares se empeñan en desdeñarlas y creer que lo verdaderamente importante son los carros y los vehículos mecanizados, los cuales, por cierto, hemos visto entrar en servicio y salir de él, sin haber disparado un solo disparo real desde 1939. Ni M47, ni M48, ni los muy queridos por el Col Candil AMX30, ni los M60, ni los LEOPARD2…ninguno utilizamos. Ahora, puedo asegurarle al Col que los BMR han sufrido decenas de ataques en Balcanes, en El Líbano y en Afganistán, y a fe mía que también han disparado mucho, más de lo que muchos creen.

Para evitar estos desajustes entre lo que la Defensa Nacional cree necesitar y lo que los Ejércitos adquieren, es para lo que servirá la POCAM, para evitar arbitrariedades y caprichos particularistas de los Ejércitos y sus directores de programas.

E iría más allá, hay que profundizar en la reforma, hay que quitar peso a los Ejércitos en este mercado persa por los recursos financieros en el que se han instalado. Los recursos no deben ser proporcionales al peso tradicional de los Ejércitos y la Armada como hasta ahora. Hay que priorizar; si el peso de nuestras operaciones lo está llevando el ET, la prioridad deberá ser los programas de modernización de los medios de éste en esas misiones que realiza. Si debemos potenciar nuestro transporte estratégico, pues más dinero para ello. No puede ser que sigamos gastando dinero en la sexta F100 –que nuestros marinos dicen no necesitar- simplemente porque hay dinero para la Armada y hay que gastarlo. El dinero es para la Defensa, y la Defensa tiene prioridades, que no tiene por que coincidir con las cuotas establecidas.

Para ejemplo un botón de la nueva POCAM y los relevos necesarios: el programa MRAP clase I y II español en Defence Industry Daily de la mano de un tal Pedro Lucio, aquí también conocido por El Tirador Solitario. Y aquí en Jane´s.

Y con todo, reafirmo mi seria convicción acerca de la necesidad de mantener una capacidad de disuasión por represalia convencional creible, la cual incluye, desde luego, las unidades acorazadas y mecanizadas. Pero con mucha cabeza y bajo supervisión del nivel estratégico.

Alpargatas.


Tal día como hoy, en una noche fría de hace cincuenta años, unos hombres -jóvenes en su mayoría- defendían con ahinco los puestos que España les había ordenado proteger en las tierras inhóspitas, y muy lejanas de sus casas, de Ifni, territorio que había sido cedido a España 100 años antes por el Sultán de Marruecos en el Tratado de Paz de Tetuán, como consecuencia de su derrota en la Batalla de Wad -Ras, en la que seguramente lucharon muchos de los bisabuelos de los que aquella noche hacían guardia .

A mediados de agosto de 1957
Marruecos solicitó la entrega de Ifni a España. Según la argumentación de Si Bekkai -jefe del gobierno marroquí- al derogarse el tratado hispano-francés de 17 de noviembre de 1912, había caducado la concesión española de Ifni. La diplomacia española sustentaba otros puntos de vista y recordaba que su soberanía venía reconocida en otros tratados anteriores. Marruecos se había comprometido por el Acuerdo de Rabat, firmado el 28 de mayo de 1956, a asumir las consecuencias de los tratados firmados por Francia.

En la madrugada del 22 al 23 de niviembre de 1957 el territorio de Ifni sufrió un a
taque generalizado proveniente del Ejécito de Liberación (nombre que escondía bajo si a las bandas guerilleras que habían operado en el Marruecos francés bajo el estricto control del Principe heredero Muley Hassan, futuro Hassan II). El origen de aquellas bandas fue objeto de polémica; el autodenominado Ejército de Liberación Marroquí portaba armas de las entregadas por Francia y España para el Ejército Real. Sus miembros procedían en parte del ejército regular y en su mayoría del Ejército de Liberación, que había luchado contra los franceses, especialmente en la zonasituada al sur de la cordillera rifeña y al norte de Fez, a fines de 1955 (Aknul, Tizi Uzli y Bured). Los grupos armados operaban también en el vecino Sahara Francés y en Mauritania. La capital de estos grupos se situaba en la ciudad de Goulimine y entre su heterogéneo armamento se encontraron también armas soviéticas.

En el ataque sobre la ciudad de Sidi-Ifni, más concretamente sobre el depósito de armanento y munición de la ciudad -el cual
fue rechazado-, cayeron las dos primeras bajas en combate de esta campaña, campaña que en España se silenció por completo. Una de ellas, el CLP. Vicente Vila Pla (7ª Cía), fue el primer caído paracaidista español en combate.


Un informe redactado por el jefe de la II Bandera Paracaidista en septiembre de 1957, sólo un mes antes del estallido del conflicto decía:

"El traje de faena comienza a deteriorarse, especialmente en aquellos que sólo tienen un traje de faena, por no haber podido entregar el segundo reglamentario por falta de existencias. En lo que se refiere al calzado (…), se encuentra francamente deteriorado en general. (…) Estas necesidades se han tendido que solucionar permitiendo que los legionarios compraran en el comercio de Ifni calzado no reglamentario y dando orden para que toda clase de servicios e instrucción (…) se realizaran en alpargatas.”

¿Les suena? A los lectores habituales seguro que sí. Los cartuchos de papel han sido un clasico en nuestras Fuerzas Armadas a lo largo de la historia.

martes, 20 de noviembre de 2007

La Agrupación de Proyección Exterior de la Guardia Civil.


La Unidad de la Guardia Civil en Kosovo (SPU).

Una foto inserta en la entrada de El Tirador: "MRAP también para las unidades policiales" me ha hecho recordar un proyecto que se encuentra estancado desde hace unos años.

La Unión Europea (UE), en el Consejo de Colonia de 1999, desarrolló sus principios sobre prevención de conflictos y gestión de crisis en el ámbito internacional. Entre los mismos estaba dotarse de unas capacidades
creíbles para la gestión de este tipo de situaciones, tanto en el ámbito de capacidades militares como civiles. En el Consejo Europeo de Feira en 2000, se fijaron los distintos ámbitos de actuación en el campo de la gestión civil de crisis: policía, fortalecimiento del estado de derecho, fortalecimiento de la administración civil y protección civil.

En el ámbito policial, la UE se marcó el objetivo de disponer para el año 2003 de 5.000 agentes de policía para misiones internacionales de gestión de crisis (1.000 desplegables en menos de 30 días). Y en la Conferencia sobre capacidades de 2001, España se comprometió a ofrecer 500 agentes (300 de despliegue rápido), entre ellos, dos Unidades Integradas de Policía (IPU), capaces de enfrentarse a situaciones no estabilizadas que sobrepasen las clásicas misiones policiales (70 a 110 hombres).

El concepto “IPU” debe de reunir entre sus capacidades: ser multinacionales, basado en la cooperación de los Estados miembros; capaces de un despliegue rápido, en menos de 30 días; ser flexibles (adaptación a cualquier misión o cambios dentro de la misma), interoperables (Operativa, administrativa y logísticamente), con capacidad de apoyo logístico propio; capaces de actuar en situaciones no estabilizadas y en todas las fases de una gestión de crisis; que puedan actuar temporalmente bajo la responsabilidad de la autoridad militar; capaces de llevar a cabo operaciones y misiones policiales de refuerzo, pero principalmente, de sustitución; constituidas sobre una base modular, (dependiendo la estructura final del tipo de misión, fase de que se trate y evolución de la situación); tener una entidad no menor de 350 policías.

El 24 de Mayo de 2004, el Ministro del Interior, ante la Comisión de Interior del Congreso, presentó las líneas generales de la política de su departamento. En dicha intervención, entre otros asuntos, expuso la necesidad de la creación, en la Guardia Civil, de una unidad especialmente dotada y preparada para participar en operaciones internacionales policiales, así como en apoyo de las unidades territoriales en tareas de seguridad ciudadana y, en su caso, ante situaciones de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública, en servicios que requieran el empleo de una unidad con especial encuadramiento y preparación.

Se pretendía dotar al Gobierno de la Nación de una herramienta que aportase una capacidad policial específica en la gestión internacional de crisis, a través de la creación de una Unidad reunida de la Guardia Civil especialmente diseñada para ser proyectada rápidamente, al escenario geográfico que se determine, reforzando, en su servicio en España, las capacidades de reserva del Cuerpo.

Control en Afganistán.

La
herramienta se llamaría Agrupación de Proyección Exterior. La hipótesis de planeamiento era desarrollar el proyecto en un escenario económico que abarcaría los ejercicios 2006 a 2010. La creación de la APEX está pendiente de la correspondiente Norma del Consejo de Ministros que implicará modificaciones legislativas importantes y, sobre todo, generación extraordinaria de recursos humanos y económicos.

El objetivo final del planeamiento es que la Guardia Civil esté en disposición de atender y mantener simultáneamente dos UPEX, así como dos apoyos especializados en funciones policiales al Ejército en el ámbito internacional.

LA AGRUPACIÓN DE PROYECCIÓN EXTERIOR (APEX)

Al mando de un Coronel de la Guardia Civil, la APEX integraría a tres Grupos (Grupos de Proyección Exterior- GRUPEX), como unidades fundamentales de encuadramiento en territorio nacional. Como órgano de Dirección contaría con un elemento de asesoría jurídica especializada en derecho internacional y humanitario, un órgano de gestión económica que preserve cierta autonomía de recursos monetarios, un órgano de asistencia sanitaria y psicológica y una plana mayor con negociados de Operaciones, Personal y Apoyo Logístico.

MISIONES:

1. OPERACIONES POLICIALES INTERNACIONALES:

Bajo autoridad civil o militar, con capacidad de hacerse cargo de cualquier fase de la gestión de crisis, cumpliendo dos tipos de misiones genéricas:

-Consolidación, fortalecimiento o refuerzo de la paz
Normalmente nos encontraremos en un escenario estabilizado donde la autoridad y el orden local existen pero es conveniente potenciarlos o adaptarlos. La carencia de beligerancia abierta hace que las Unidades frecuentemente se dividan en grupos de expertos desplazados al área en cuestión. Se contemplan en este tipo, las funciones de Prevención y monitorización, Asesoramiento policial y Formación en los niveles que se establezcan.

Guardia Civil frente al nuevo "Puente Viejo" de Mostar.

-Sustitución de las capacidades policiales
Se desarrolla cuando la policía en el área en crisis no puede garantizar el libre ejercicio de derechos y libertades. Se enmarca en un ambiente beligerante que requiere la utilización de Unidades reunidas investidas internacionalmente de poder ejecutivo que les permita realizar su trabajo con las suficientes garantías, proporcionando un entorno de seguridad civil, garantizando que no se violen los derechos humanos y facilitando la reactivación de los aparatos judicial y penal.

Para ello, se necesitan fuerzas de policía que desplieguen rápidamente con el fin de impedir que la situación se deteriore más. Se requiere una fuerza integrada de policía, flexible e interoperable que reúna un conjunto amplio de capacidades.

Resaltan entre las funciones en misiones de sustitución: garantizar la Seguridad Ciudadana y el restablecimiento del Orden Público, la protección de Autoridades y minorías, la vigilancia temporal de infraestructuras sensibles; velar por el cumplimiento de los acuerdos internacionales (control de desarmes, observación fronteriza, movimientos de refugiados y desplazados, etc).

2. APOYO ESPECIALIZADO EN FUNCIONES POLICIALES:

Tanto colaborando con las Fuerzas Armadas españolas o en contingentes militares multinacionales, básicamente como elementos que desarrollen funciones de Policía Judicial. En este sentido cabría destacar funciones como la investigación de accidentes del contingente, la investigación de incidentes graves cometidos por o contra los miembros del contingente o el auxilio a las autoridades judiciales.

3. RESERVA EN TERRITORIO NACIONAL:

El tercer bloque de misiones genéricas que deberá afrontar la Unidad que se pretende crear, se enmarcará en el refuerzo de las capacidades de reserva especializada en territorio nacional, manteniendo una permanente coordinación y complementariedad con las Unidades específicas actualmente constituidas.

Hasta la fecha nada de lo estudiado y propuesto ha sido puesto en marcha. Aunque lo intentan de todas las maneras posibles.

Siempre honrada.... la Guardia Civil.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Lince, que nombre más español.


Les presento el IVECO MLV LINCE -sólo en servicio en el Ejército italiano y noruego- con blindaje AMAP de protección hasta nivel 4 del STANAG OTAN. Ya probado en Afganistán.

Proximamente en España, o eso se ha prometido.

En este enlace "Norway Rush-Orders Mine-Resistant Iveco MLVs" de Defence Industry Daily pueden ver sus caractérísticas, incluida la panza en V y otras lindezas en los bajos.




Para los puristas que seguro matizarán:

  • El programa MRAP es sólo y exclusivamente un programa estadounidense. Ningún vehículo que no forme, o no haya formado parte de este programa, es un MRAP. Así el Mastiff, o el Dingo, o el Mungo, o el Duro, o el Matador, o el Marauder, o el Grizzly alemán, o el Yak, o muchos otros, no pueden ser denominados MRAP por el sencillo motivo de que no están incluidos en el programa americano.
  • En Alemania, el programa gemelo se llama GFF y tiene 4 categorias: the lightweight, 5.3-ton GFF 1; the 7.5-ton GFF 2 (el lince compite en él); the 12.5-ton GFF 3; and the 25-ton GFF 4.
  • El concepto es exactamente el mismo en todos los programas, vehículos con alta protección contra minas y alta protección contra proyectiles cinéticos. Quizás tendremos que pensar en un nombre para el nuestro -vehículos de alta protección (VAP)-, o simplemente llamarlos MRAP de escuadra y MRAP de pelotón. Yo voto por VAPs.

Y para los caprichosos también en versión civil. Sin las chatis incluidas, creo. Aunque esto sí que es una escuadra para ir de misión.

Y esta semana esperemos que sepamos algo de los de pelotón.

P.S. Y que los de la UME no vean la foto de wikipedia. Tienen un peligro en esto de los vehículos nuevos...

طرفاية سنتي 1957-1958



Desde el otro lado también nos recuerdan...

Villa Bens. Cabo Juby. ..Tarfaya

Preciosa música.

Maravillosas imágenes de jóvenes, entonces, que hoy andan entre nosotros con ellas clavadas en sus pupilas.

Guerra IFNI-SAHARA


Desgraciadamente la censura sólo dejó pequeños recuerdos de aquella campaña. Tras la propaganda se puede adivinar algo de lo ocurrido.


Para los combatientes de entonces, en su recuerdo.

viernes, 16 de noviembre de 2007

El barril a 100$. Un antiguo sueño.

Las cotizaciones del crudo subieron a casi 100 dólares la semana pasada en Nueva York (98,60 dólares el barril, un récord histórico) antes de replegarse.

Alguien, además de Chavez, soñó una vez con el precio del barril a 100$ .

A veces da miedo saber lo desorientado que ha estado –y en algunos aspectos todavía está- el gobierno de EEUU en la lucha contra el terrorismo Jihadista.

La guerra global contra el terrorismo (GWOT) y la democracia global exportada languidecen, y una lucha mucho más sofisticada se va perfilando; aún así en España les llevamos una recta de ventaja en conocimientos y experiencia.

A pesar que leen con detalle a Rogelio Alonso y a Fernando Reinares, las numerosas referencias a España, a ETA y al 11-M no parecen siempre muy precisas. Y es que nunca un imperio valoró las aportaciones de la periferia en su justa medida. Nosotros tampoco.

Del largo documento “Terrorism: What’s Coming-The Mutating Threat” del Memorial Institute for the Prevention of Terrorism (MIPT), destaco, para los que les de pereza o carezcan del tiempo necesario, lo siguiente [el ensayo de Alex P. Schmid sobre "Terrorism and Energy Security:Targeting Oil and Other Energy Sources and Infrastructures" no tiene desperdicio]:

The Organization of Terrorism.

"The U.S. strongly denies that American policies could contribute to terrorism. There is only a hint of recognition that the expansion of a diffuse jihadist movement has occurred since 2003 and that the war in Iraq is incompatible with creating a global environment that is inhospitable to terrorism. The 2006 strategy statement admits only that “The ongoing fight in Iraq has been twisted by terrorist propaganda as a rallying cry.” On the other hand, the 2006 National Intelligence Estimate (at least as far as is publicly known) cited the war as a motivation for diffuse jihadism but also noted that decisive defeat of the Al Qaeda organization in Iraq would likely be a set back for the global movement. In the short run, it is undeniable that the use of military force by the West against Muslims, no matter what their political allegiance or sectarian bent, fuels extremism."

"The organization of terrorism is complex and sometimes contradictory. There is no single uniform model, no one type of terrorist organization, whether past or future. Instead groups are adaptive and flexible. Continued organizational development and thus more surprises can be expected in the future. Different structures of terrorism require different policies. Oversimplification of the threat cannot lead to an effective response.”


Targeting Oil and Other Energy Sources and Infrastructures.

“…oil is not simply a source of world power, but a medium for that power as well, a substance whose huger importance enmeshes companies, communities, and entire nations in a taut global web that is sensitive to the smallest of vibrations. A single oil ‘event’….sends shockwaves through the world energy order, pushes prices up or down, and sets off tectonic shifts in global wealth and power.” Paul Roberts. The End of Oil. (London: Bloomsbury, 2005) p 93.


“Targeting oil interests is lawful economic jihad. Economic jijad in this era is the best method to hurt the infidels.”. Sheik Abd-Al-Aziz bin Rashid al Anzi. “The Religious Rule of Targeting Oil Interests.”http://www.tajdeed.org.uk/forums, February 26, 2006; cit. Michael Scheuer, Stepan Ulph & John C.K. Daly. Saudi Arab Oil Facilities: The Achilles Heel of the Western Economy. (Washington, D.C.:Jamestown Foundation, May 2006) p 10.

"Table 2: Basic Energy Facts.
– Peak year of new oil discoveries was 1960; it has been downhill ever since.
– Global economy depends on cheap oil for about 40 percent of its energy needs.
– The USA, with less than 5% of the world’s population, uses almost 25% of the world’s total energy; US lifestyle is twice as energy-intensive as that in Europe and Japan, and about ten times the global average.
– From the G-8 states, Russia has 27% of the world gas reserves and 6% of proven oil reserves; the remaining G-7 have only 4% of gas reserves and 9% of the oil.
– World oil demand, now at [more than] 80 million barrels a day, will jump to 140 million by 2035; natural gas will climb by over 120 percent; coal by nearly 60 percent.
– Electricity demand could, by 2020, be 70 percent higher than today.
– Current energy economy (oil wells, pipelines, tankers, refineries, power plants, transmission lines is worth an estimated ten trillion dollars.
– Saudi Arabia possesses some 265 billion barrels of oil in its subsoil - a quarter or more of the world’s proven crude reserves. "
[Sources: Paul Roberts. The End of Oil. The Decline of the Petroleum Economy and the Rise of the New Energy Order. London, Bloomsbury Publishing, 2005, pp. 7 – 15; The Sunday Times (London), 9 July 2006, p. 26. ]

Al Qaeda’s Strategy.

"Some authors hold that it is Al Qaeda’s strategy is to “bleed America to bankruptcy.” Al Qaeda has threatened to attack critical Western infrastructures, the “hinges” of the world economy, as bin Laden calls them. These obviously include oil. One step to come closer to this goal is to drive up oil prices to what bin Laden termed a “fair price at the present time” - “a minimum of $100 a barrel.”29 Between 2000 and 2005 the oil prices tripled and in July 2006 peaked at more than $78.30 The “minimum of $100 a barrel” which bin Laden had in mind some years ago no longer sounds fantastic. The question is: can the world absorb a price rise of such an extent without plunging into an economic recession which would, in turn, trigger political instability in emerging economies.”


Observations on the Future of Terrorism.

"In Northern Ireland and the Basque region of Spain what were essentially terrorist groups not all that long ago (the Irish Republican Army and Basque Homeland and Liberty) are recreating themselves as peaceful political parties, intent on using the ballot box rather than the gun to pursue their political objectives. "(pg 44)

Lessons from the Counterinsurgency Era.

“In other words” he wrote, “it is imaginable, although far from likely in the near term, that some future White House may become interested in scrutinizing the counterinsurgency experience which we have been at some pains to recount and analyze in these pages, for lessons on both the pitfalls and the positive courses of action suggested by the successes and failures of the period. For several reasons it is much to be hoped that such does not turn out to be the case, and most especially for the reason that the lessons or our experience are clearly negative. Effective counterinsurgency, avoiding the brutalities of unadorned suppression, and seeking to deal with the genuine issues in a sophisticated manner which does no damage to our moral and democratic principles, is a complex and difficult maneuver for which the United States has shown no talent.” Douglas S. Blaufarb, The Counterinsurgency Era: U.S. Doctrine and Performance. (New York: The Free Press, 1977) Strategic Counterterrorism: The Way Forward.

“In developing a full-spectrum response, the government must be able and willing to develop state responses beyond the traditional police and intelligence approaches. It must consider applying a range of tools from other bodies and enforcement authorities. They include: the immigration, customs, and other enforcement authorities; the coast guard (or the marine police); the military; the port, airport and other transportation authorities; the private security industry; th e finance and banking sector; the media; the telecommunications sector; community and othe r influential leaders; and religious and educational institutions.”

50 aniversario campaña Ifni-Sahara.

El próximo 22 de noviembre se celebra el 50 aniversario del inicio de la campaña de Sidi-Ifni. Guerra irregular, de cuarta generación, híbrida , o como la quieran llamar los pensadores actuales, que se libró mucho antes de que los que inventaron estos conceptos ni siquiera pensasen en ellos.

Por favor que nadie se pierda el ejemplar de octubre de la revista Ejército. Desgracidamente no hay versión digital de la misma, pero si tienen algún conocido que se la pueda prestar o conseguir, no duden en leerla con detenimiento (aquí un sumario).

Los planos, los relatos, las fotos...no hay desperdicio.

De lo poco que se salva de la nueva Ley de la Carrera Militar, no sólo se salva sino que se doctora cum laude, es:

"Disposición final novena :

1.Las Cortes Generales reconocen la entrega y sacrificio de los que, cumpliendo el servicio militar obligatorio, estuvieron integrados en unidades expedicionarias de las Fuerzas Armadas destacadas en el territorio de Ifni-Sahara y participaron en la campaña de los años 1957 a 1959.

2.El Ministerio
de Defensa desarrollará programas de apoyo que permitan reconocer la labor llevada a cabo por quienes participaron en las citadas campañas, contribuirá a las actividades de las Asociaciones que los agrupan y elaborará un listado de participantes en la contienda para estudiar posteriormente ayudas nominales.”

domingo, 11 de noviembre de 2007

Escucha Chavez, please.

Shut up, Spain's king tells Chavez.
Yo desde luego preferiría que fuese Fergie la que me hiciese callar.

viernes, 9 de noviembre de 2007

Transformando las FAS para las operaciones de 5 bloques.

El marco general.

La primera y más básica pregunta a la que nos debemos enfrentar al pensar en realizar cambios y/o transformaciones en las
FAS es el ¿para qué? De nada sirve pensar o proponer cambios si no van terminantemente dirigidos a alcanzar unas finalidades claras y previamente reflexionadas.

Desde los primeros 90 todos los Ejércitos del mundo occidental –nuestros antiguos adversarios orientales también, con ritmos desiguales- nos hemos lanzado a la espiral transformadora –cuando no revolucionaria- como consecuencia del brutal cambio en el panorama estratégico global. Para llevar a cabo los cambios se repensaron las tres variables fundamentales de unas FAS (cantidad, calidad y capacidad) y se tomó acción en todas ellas para conducirnos a un modelo de FAS totalmente profesionales, más reducidas, tecnológicamente más avanzadas, de acción ineludiblemente conjunta, capaces de operar en ambiente combinado y orientadas a obtener la superioridad abrumadora en el enfrentamiento convencional. Pero curiosamente esta transformación no fue pensada con un “para qué” claro. Se entendía en todos los modelos estratégicos que el enfrentamiento de bloques en las llanuras de Europa era cada vez menos probable pero no se determinaba cual sería la próxima estación, se dejaba intuir en todos las estrategias que el futuro era confuso, que la niebla se espesaba y que no nos dejaba entrever lo que esperaba detrás.

Desde luego la guerra del Golfo del 91 –la primera de la naciente era hegemónica estadounidense- fue determinante para todos los países occidentales en esta transformación, ya que supuso la primera vez que se ponía a prueba verdaderamente la capacidad y la filosofía militar occidental contra una filosofía y capacidad del casi extinto modelo soviético. El M1 contra los T72, los Patriot contra los SCUD, los F-14 y los Tornados contra los MIG más avanzados, por fin se demostraba que “la calidad” triunfaba definitivamente frente a “la masa” con un número muy limitado de bajas propias por su superioridad tecnológica y su elevada preparación.

Y tras ello los pensadores militares miraron a la última gran guerra y decidieron que la receta conocida era la más adecuada porque ya había demostrado sus bondades. Todos nos lanzamos a la inmediata transformación de las FAS de la guerra fría hacia unas fuerzas mucho más potentes y pesadas pero mucho más reducidas en número, tecnológicamente muy avanzadas y confiadas en la superioridad tecnológica de enfrentamiento. Y para no producir aumentos significativos en el gasto militar se planearon plazos realmente largos en los que afrontar los cambios necesarios; los programas plurianuales de cazas, de buques, de misiles, de piezas de artillería y carros de combate de altísima capacidad tecnológica florecieron en todo el mundo occidental e hipotecaron los recursos durante lustros –aún hoy todos los países de nuestro entorno y nosotros mismos estamos embarcados en ellos- a la vez que la reducción de tropas –especialmente de las unidades ágiles y ligeras que consumen muchos recursos humanos- crecía exponencialmente.

El marco de referencia nacional.

Y ¿por qué esta larga introducción? Porque, de repente, el 11S sacudió nuestro particular sueño del “fin de la guerra” y el general del “fin de la historia”; o al menos sacudió el de EEUU arrastrando a toda la OTAN consigo. EEUU ante un atentado terrorista reaccionó invocando el Art. 5 del Tratado del Atlántico Norte y declarando la Guerra Global contra el Terror, es decir reaccionó con la única –que probablemente no mejor- herramienta que le proporcionaba inmediatez en la respuesta: las FAS. Unas FAS que estaban en el proceso anteriormente descrito y que habían arrastrado por simpatía a todas las FAS euro-atlánticas a parecidas sendas de cambio. Pesadas, poco numerosas, poco proyectables y pensadas para la superioridad en los conflictos convencionales a través de la tecnología, se tenían que enfrentar de repente –y con urgencia- a la Operación Anaconda contra fuerzas ligeras numerosas, con métodos irregulares, de naturaleza insidiosa, difícilmente localizable, con elevada moral y en un terreno que exigía echar ineludiblemente pié a tierra y husmear cada palmo de terreno para su derrota. De todos es sabido el resultado, esta primera guerra del siglo XXI había encontrado a las FAS de EEUU con el paso cambiado. Numerosas lecciones aprendidas surgieron de esta operación. Algunas se han desclasificado y se pueden encontrar en: “The Anaconda Problem: The Information Age RMA meets Napoleon” de Andres, Richard and Davis, Mark para la International Studies Association. (2007). En sus propias palabras: “The result for Anaconda was operational incompetence and chaos”.

Como corolario de todo lo expuesto cabe extraer la siguiente conclusión: es crucial el pensar con mucho detenimiento cuál ha de ser el papel de nuestras FAS en la lucha contra riesgos nuevos como son el terrorismo internacional, la inmigración ilegal y la lucha contra el crimen organizado, y cómo, y en qué porcentaje, se quiere que afecte a las capacidades actuales. De ello depende que seamos capaces o no de enfrentarnos al próximo conflicto con garantías. Una vez ordenada la corrección en el rumbo del buque de las FAS se tarda tiempo en adoptarlo, y una vez en el nuevo rumbo, la vuelta atrás es verdaderamente difícil. Debido a estos plazos de tiempo largos que conllevan los cambios de rumbo, los futuros líderes políticos pueden ver verse constreñidos en sus capacidad de acción a través de las FAS por decisiones tomadas 10 o 15 años antes, decisiones adoptadas para afrontar realidades que ya no existen cuando los nuevos sistemas de armas adquiridos y los nuevos procedimientos planeados entonces, entran completamente en funcionamiento. “Policymakers must recognize that the defence transformation decisions they make now are the ones with which as yet unidentified future political leaders will have to live.”. en “Defense transformation: To what, for what?” del Col Kevin P. Reynolds. US Army War College Professor. (2006).

Así en España desde el 11S, y muy especialmente desde el 11M, el peso que las FAS están asumiendo en la lucha contra los nuevos riesgos es creciente. La Revisión Estratégica de a Defensa (RED) de 2003 lo anunciaba y la DDN de 2004 y la LODN 5/2005 lo han consagrado como misión de las FAS. En concreto en la citada Ley Orgánica 5/05 encontramos para luchar con estos nuevos riesgos varios ámbitos de actuación posibles: la vigilancia y el control de los espacios de soberanía nacional, el apoyo a las FCSE, las misiones de respuesta a acciones “Renegade”, el apoyo a las administraciones públicas, las acciones encaminadas a preservar la seguridad de los españoles en el extranjero y las acciones de colaboración en el ámbito internacional para preservar o reconstruir la estabilidad y/o seguridad de un área determinada.

Todos estos documentos suponen un cambio importante en las misiones de las FAS pues desarrollan definitivamente el empeño que tiene España en el uso de sus FAS para esta lucha. Y no sólo en el plano teórico, de nuestra automática participación en la Operación “Libertad Duradera” de finales de 2001–finalizada para España en 2004-, pasamos a la Operación “Active Endevour” de la OTAN –aún en marcha-, a la Operación “Romeo-Mike” en nuestro propio territorio para apoyo a las FCSE en la lucha antiterrorista, a la defensa de la valla en las ciudades españolas norteafricanas y finalmente a la Operación “Noble Centinela” en las Islas Canarias para apoyo a la lucha contra la inmigración ilegal.

Desde luego la participación de las FAS en estas misiones es creciente, y la determinación política es clara; clara pero no absoluta. El modelo de respuesta militar elegido por España para esta lucha ante los nuevos riesgos es de carácter restrictivo, es decir que no debe –ni puede- constituir ni nuestra primera ni nuestra principal herramienta, sólo cuando se den ciertas circunstancias será justificada. En concreto la filosofía de empleo nacional de las FAS es coincidente con la que se determinó en la cumbre sobre terrorismo celebrada en Madrid en marzo de 2005, en la que se consagraba este carácter restrictivo y en la que se consideraba adecuado su empleo en los siguientes casos: cuando las FCSE nacionales se vean desbordadas por la amenaza, en refuerzo de estas FCSE aportando capacidades específicamente militares, para impermeabilizar fronteras nacionales, en cooperación con FAS internacionales allende las fronteras propias y cuando la amenaza se encuentre amparada en territorios de otros países que sean incapaces de actuar por si mismos. Ver “La Serie de Documentos de Trabajo de la Cumbre de Madrid” del Club de Madrid (2005) en: http://cumbre.clubmadrid.org/.

Por tanto este ha de ser nuestro marco de referencia, nuestro papel en esta lucha será creciente pero siempre de carácter restrictivo, principalmente de apoyo. Este modelo va en consonancia con el francés o el alemán, pero difiere sustancialmente del estadounidense; es importante tenerlo presente a la hora de realizar transformaciones a imagen y semejanza de otros.

Los cambios necesarios: políticos y militares.

Este es pues nuestro “para qué” nacional. Conocerlo es clave para que los militares piensen y aconsejen sobre el “qué” cambiar. Y dado que nuestro “para qué” es restrictivo, nuestro “qué” cambiar deberá tener parecido un carácter similar. No debemos olvidar que este país tiene una posibilidad más elevada que otros de sus socios europeos en verse involucrado en un conflicto convencional, y por tanto no deberíamos caer en el error de pensar que aunque hoy en día nuestra principal actividad operativa se ciñe a estas misiones y a las de apoyo a la paz, éstas van a ser con exclusividad nuestros próximos conflictos.

Para nosotros es muy importante mantener una capacidad de disuasión convencional por represalia elevada. Esta capacidad además nos será igualmente útil contra aquellos estados que pudieran proporcionar medios y apoyos a grupos terroristas que atentasen contra intereses españoles, o bien utilizasen, directa o indirectamente, el terrorismo para resolver conflictos con nuestro estado.

Por tanto es nuestra obligación, partiendo de nuestro marco de referencia, y manteniendo como eje fundamental de nuestra estrategia la disuasión convencional, reflexionar sobre los cambios que esta lucha ante los nuevos riesgos nos puede exigir para mejorar nuestro rendimiento en ella. Y a ser posibles todos los cambios que realicemos han de ser de validez dual: para escenarios convencionales y para otros de menor intensidad.

Pero además es necesario distinguir, entre estas necesidades de cambio, las que no afectan sólo al ámbito militar y que por tanto dependen en gran medida de determinaciones políticas, y aquellas que sí están dentro de la esfera de control de las FAS, y que por tanto no tienen mayor dificultad que la voluntad militar de su puesta en marcha.

En el ámbito político cabe resaltar las siguientes:

– La primera y más fundamental necesidad de cambio no es del ámbito militar pero le influye definitivamente. Esta es la concreción a nivel estatal de estrategias integrales, que aúnen y coordinen esfuerzos de todas las herramientas a disposición de Estado, para la lucha contra estos nuevos riesgos. Estas estrategias se han de plasmar en planes concretos que deben ser ensayados y evaluados con cierta regularidad.

– Basados en estos planes, y en las capacidades y actividades que en ellos se exija de las FAS, se ha de comenzar a diseñar un adiestramiento adecuado para las unidades militares involucradas. El viejo principio militar de que una unidad combate como se instruye, es de perfecta validez para estas nuevas situaciones. Si no hay instrucción y adiestramiento, conjunto en lo militar, e integral con otros ministerios y agencias, difícilmente podremos alcanzar grados aceptables de eficacia.

– Se debe paralelamente comenzar a pensar en métodos de mando y control comunes con la administración civil, especialmente con el ministerio del Interior, que agilicen la comunicación, que permitan compartir la información en tiempo real y que permitan lograr eficiencia en los costes de las acciones del Estado. Algunos pasos se han dado pero deberían ser más decididos y firmes en beneficio de la sociedad a la que todos servimos. En este sentido la operación “Noble centinela” de lucha contra la inmigración ilegal el área de Canarias, bajo el control de un general de la Guardia Civil o la creación del Almirantazgo de Acción Marítima que en cierto modo empieza a coordinar la acción global del estado en la mar, son pequeños pero decisivos pasos en esta dirección.

– Para aquellos que diseñan las políticas y planes de defensa debe ser fundamental tener en mente que sus decisiones afectarán a administraciones que vendrán en 8 o 12 años, y que por tanto, pese a que la situación a la que se enfrenten puede parecer muy clara a día de hoy, puede no serlo en algunos años, la niebla y la fricción se encargarán de ello. Por ello las capacidades que se planeen hoy deben abarcar el mayor número de escenarios estratégicos posibles y nunca exclusivamente ceñirse a modelos cerrados o de tendencia internacional.

– En este nivel sería conveniente también concienciar a la sociedad española de la necesidad y del imperativo de la participación de las FAS en estas misiones para seguridad de todos, así como de las propias restricciones que la legislación nos impone en ello.

Desde el punto de vista militar los cambios a afrontar son:

– Por supuesto, y en primer lugar, debemos mejorar nuestra capacidad de operar de forma conjunta. Llegamos tarde muchos años a esta concepción conjunta de las FAS y debemos acelerar en las reformas. Ya se ha dicho anteriormente que el futuro es integral, de las distintas administraciones en colaboración: lo diplomático, lo económico, las administraciones regionales, lo político, la seguridad interior y la exterior en conjunción para dar un resultado mucho más eficiente y eficaz a la sociedad a la que todos servimos. Y lo complicado es que deberemos adaptarnos a esta nueva visión integral a la vez que profundizamos en lo conjunto.

– Debemos mejorar la capacidad de proyección de nuestros medios sobre teatros alejados –capacidad expedicionaria- y una vez dentro de éstos, debemos mejorar nuestra capacidad de proyectar nuestro poder sobre tierra. Para ello es necesario ahondar en algunas de las reformas llevadas hasta ahora en los Ejércitos y la Armada:
  • En el ámbito terrestre debemos aligerar nuestros medios pesados y proteger nuestros medios ligeros cubriendo el vacío que se crea entre estos extremos. Precisamente es en este vacío de “lo medio” donde hoy se mueve el conflicto normalmente. En este sentido el programa recientemente anunciado de renovación de medios ligeros y BMRs en operaciones para su sustitución por MRAPs, así como el adelanto del programa del nuevo BMR 8x8 es una buena noticia.

  • En el ámbito marítimo se está profundizando desde hace unos años especialmente en estos aspectos, la capacidad expedicionaria y la proyección sobre tierra del poder naval. La próxima llegada del BPE, la posible adquisición de misiles de largo alcance para nuestras F100 y la potenciación de la Infantería de Marina son claros exponentes de ello. Así mismo, y ya nombrado ut supra, la creación del Almirantazgo de Acción Marítima con la misión de proyectar y conjuntar la acción del estado en la mar y la llegada de sus nuevos buques de acción marítima son ya pasos en la dirección adecuada.

  • En el ámbito aéreo-espacial, la potenciación resuelta de la capacidad de transporte estratégico y la de nuestra capacidad satélite es crucial para estas operaciones. Sin embargo quizás deberíamos meditar sobre la capacidad de vigilancia marítima y la capacidad de apoyo a tierra de nuestras aeronaves y evaluar si no tenemos ciertas carencias, no sólo en los tocante a las aeronaves sino también en nuestra capacidad de dirigir los ataques desde tierra a través de equipos TACP/FAC.

Deberemos mejorar dos aspectos cruciales del conflicto futuro –ya presente- y que serán beneficiosos en todo el espectro de misiones: por un lado la capacidad de operar en red, con la presentación simultanea de la información en tiempo real a todos lo niveles y por otro la potenciación de los sistemas de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento y Adquisición de Objetivos (ISTAR). La creación de sistemas conjuntos de C4I y la potenciación del CIFAS y las unidades de obtención de inteligencia de todo tipo son asuntos pendientes que deberían merecer nuestra atención primordial.

– Será crucial seguir cambiando nuestra cultura de adiestramiento. El esfuerzo que se centraba en el adiestramiento principalmente convencional pensando que todo lo demás sería menos exigente y que por tanto no había que entrenarlo, cada día está más abandonado, pero aún así, no ha sido corregido completamente. El concepto de la guerra de los tres bloques del General Krulak en "The Strategic Corporal: Leadership in the Three Block War" : operaciones de alta intensidad, ayuda humanitaria y apoyo a la paz, está plenamente vigente en su filosofía básica, léase la complejidad del espectro de las misiones a las que un soldado se enfrenta en el área de operaciones hoy en día, pero quizás habría que completarlo con dos bloques más: las operaciones en ambiente irregular y las operaciones de apoyo a las autoridades civiles, es pocas palabras la guerra contrasubversiva/containsurgente y las misiones de apoyo policial. En EEUU han acuñado el término Military Operations Other Than War (MOOTW) que comprende: ayuda humanitaria, mantenimiento de la paz, imposición de la paz, contrainsurgencia, insurgencia y asistencia militar. Ver JP 3-07 Joint Doctrine For Military Operations Other Than War.

Aunque a los jóvenes nos parezca mentira nuestros mayores, que quizás estén menos preparados en los tres primeros bloques, sabían muchísimo de estos dos últimos pilares. Las orientaciones de subversión y contrasubversión de 1977 (ET O-0-2-5) son un claro ejemplo. Principalmente basadas en las experiencias en operaciones en ambiente irregular como el de Ifni o Sahara y en alguna otra de ámbito interno en la lucha contraguerrillera y por tanto muy influenciadas por la doctrina soviética revolucionaria eran motivo de estudio detallado hasta los primeros 90 en las Academias Militares españolas pero de repente fueron abandonadas.

– Se debería revisar nuestro sistema de planeamiento de defensa y el modo por el que se proponen las capacidades militares futuras al nivel político. Un enfoque conjunto e integral impone que sean los escalones conjuntos más elevado los que lleven la iniciativa a la hora de conducir las nuevas adquisiciones. De poco sirven las Revisiones Estratégicas y las Directivas de Defensa si luego no se ven respaldadas por una logística genética coherente. Puede ocurrir, y de hecho ocurre, que las políticas de defensa y los medios que se adquieren para llevarlas a cabo son divergentes.

– Por último la creciente presión social para que protejamos a nuestras tropas de los ataques que nos produzcan bajas nos va a exigir inevitablemente el mejorar la protección de nuestra fuerzas, no sólo con medidas pasivas como chalecos, vehículos o cascos, sino con medidas activas como el armamento ligero y los visores nocturnos más modernos, el uso cada vez más generalizado de vehículos no tripulados tanto aéreos como terrestres a todos los niveles que disminuyan el riesgo que corran nuestras tropas, y con fuerzas capaces de actuar cada vez “más allá del horizonte”. Pero además, la también creciente exigencia de proteger a los civiles entre los que operemos de daños colaterales, nos exigirá de medios de adquisición y ataque cada vez más precisos, así como del empleo de armas no letales para utilizar en las operaciones de baja intensidad.


Conclusión:

La primera y más crucial pregunta a la hora de afrontar cambios en las FAS debe ser siempre acerca de la finalidad. Ésta debe estar siempre clara y coordinada con el poder político, pues de ello dependerá que la Nación –y en su representación otros gobernantes que aún no han sido elegidos- tenga las herramientas adecuadas en un futuro que aún es incierto. Dado y asumido este margen inevitable de incertidumbre y conociendo el propósito político para el que se inicia una transformación se puede comenzar a pensar los asuntos que conviene cambiar.

Para España es claro que la determinación política de empleo de las FAS en operaciones cada vez más diversas y diferentes de las del combate convencional no es pasajera. La LODN 5/2005 consagra las misiones de las FAS y las operaciones para las que deben prepararse y a primera vista se concluye que las operaciones en las que nuestras autoridades políticas piensan mayoritariamente emplearnos no son las tradicionales de combate convencional, sino esas otras operaciones que incluyen: las de apoyo a la paz, las de carácter humanitario, las de rescate, las de apoyo a la acción del Estado en la mar, las de apoyo a FCSE en materia de lucha contra el terrorismo, las de reacción a acciones terroristas tipo “Renegade” y las de asistencia a la seguridad y reconstrucción en países extranjeros. Y lo más probable será que se tengan realizar varias de ellas simultáneamente en un área de operaciones.

Estas nuevas responsabilidades de las FAS no sólo les afectan a éstas sino que también implican cambios en ámbitos ajenos a los Ejércitos y la Armada, principalmente serán: la creación de estrategias interministeriales coordinadas, el diseño de planes de respuesta integrales, concretos y ensayados, la creación de centros de coordinación y mando interdepartamentales, el reconocimiento de la política de defensa como un asunto que afecta a largo plazo y por tanto susceptible de ser consensuado y un esfuerzo pedagógico para explicar a la sociedad estos nuevos retos. Todos ellos son asuntos que sólo el poder político puede abordar desde un enfoque integral.

Pero sin duda estas nuevas misiones requieren de transformaciones en nuestras FAS, desde los medios y los procedimientos hasta las mentalidades. ¿Pero hasta dónde? España no puede olvidar que tiene una moderada posibilidad de verse envuelta en un conflicto convencional de alta intensidad y para ese esfuerzo máximo debe tener preparadas sus FAS. Nuestra estrategia de disuasión por represalia ha de ser creíble y eso nos obliga a mantener continuamente en el tiempo fuertes capacidades de carácter convencional.

Lo ideal sería ser capaces de dotarnos de unas fuerzas robustas y tecnológicamente diversificadas con capacidad para llevar a cabo ambas, las misiones de alta y las de baja intensidad. Eso no es desde luego fácil pero si que puede marcarnos un rumbo correcto en la aproximación.

Las reformas que se tengan que afrontar para responder a estas nuevas operaciones deben tener en lo posible un carácter dual, deben poder satisfacer ambos requerimientos a la vez. Las capacidades adicionales que sean exclusivas de estas nuevas misiones deben tener carácter restrictivo pese a que la hipótesis –y la realidad- de empleo más probable de nuestras FAS gira en torno a ellas.

Entre estos cambios de objetivo dual que se propone adoptar destacan: mejorar la capacidad de operar de forma conjunta e integral con otras administraciones y ministerios, potenciar el liderazgo del nivel estratégico en la propuesta de OCAM, aumentar la diversificación del adiestramiento de nuestras unidades hasta lograr abarcar “los cinco bloques”, potenciar la capacidad de proyectarnos a escenarios lejanos y dentro de ellos de actuar sobre tierra y deberemos hacer evolucionar sustancialmente nuestras capacidades C4I e ISTAR.

En resumen, la hoja de ruta a seguir vendrá marcada por cambios con carácter restrictivo, a ser posible de carácter dual, pero que conduzcan a diversificar claramente nuestras capacidades. Para el futuro no deberíamos ya nunca más desechar ningún posible escenario de actuación y mucho menos aquellos en los que ya hemos actuado. Y deberemos recordar por siempre que lo más probable será que tengamos que hacer frente a operaciones muy diversas que se nos presentaran enredadas simultáneamente en un mismo conflicto, de alta y baja intensidad, de reconstrucción y contrainsurgentes, humanitarias y de lucha contra terrorista ; y es que, con casi toda seguridad, nuestra actuación en el futuro tendrá que estar preparada para llevar a cabo operaciones de cinco bloques… y aún más.